Khristian Briones estuvo la mitad de su vida en la cárcel consumiendo drogas cada vez más nocivas y adictivas.
Hoy se dedica a rehabilitar e insertar socialmente a personas que vivieron su misma situación por medio de una fundación creada por él mismo.
Esta es la historia de un hombre que desea cambiar la realidad de Chile, rompiendo el círculo de familias vulnerables que viven diariamente entre la droga y delincuencia.