PREJUICIO
Emma de Ramón y Pablo Armijo, dos resilientes al prejuicio social nos cuentan cómo han logrado sobrellevar sus vidas.

MEJORES MOMENTOS
"El problema es el Estado. Las personas que somos lesbianas o gays no tenemos el reconocimiento de nuestros derechos civiles", Emma de Ramón.
"Me miran feo, me cuestionan, me dicen mercenario y que yo hago trabajo sucio", Pablo Armijo.
"Mi principal enemigo siempre ha sido el prejuicio. Todo el mundo quería que nosotras lloráramos frente a la cámara", Emma de Ramón.
"La discriminación que siento hacia lo que yo me dedico es actualmente, porque me preguntan '¿pero tú ganas dinero sucio?'", Pablo Armijo.